La calidad del trabajo es un factor clave en la percepción del volumen de tiempo intrínseco y extrínseco que se dedica a cualquier trabajo. Esperamos que para que cualquier trabajo sea de alta calidad*, necesariamente haya requerido que se haya invertido una cantidad sustancial de tiempo en práctica, reflexión, artesanía, ideación, redefiniciones, reordenamiento, reparación, eliminación y atención.
Sinceramente, no podemos ser ingenuos y creer lo contrario en la mayoría de los casos, incluso cuando existen posibilidades de desviaciones, posiblemente sabios.
Realizar un gran trabajo requiere tiempo, principalmente según dos definiciones .
Mi argumento gira en torno a las prácticas de asignación artificial y consciente del tiempo (en todos los sentidos que importan) con el propósito de realizar un buen trabajo. Pero, como ocurre con la mayoría de las cosas, nos encontramos con limitaciones. La gran pregunta que surge justo después de que el individuo reconoce que se hace un buen trabajo con tiempo es cómo eliminarlas. ¿Cómo puede el individuo encontrar tiempo?
Para las mentes creativas, es fácil caer en situaciones en las que se tienen que ocupar de varios proyectos (de interés y de la profesión) al mismo tiempo. Incluso con definiciones claras de qué cosas son prioritarias y cuáles no, creemos que se puede gestionar esta brecha de intereses y proyectos.
Esto puede ser cierto, pero no sería el mejor argumento decir que la calidad de la atención prestada es la misma que si se hubiera establecido y mantenido una prioridad.
Una ecuación para hacer un buen trabajo puede ser sencilla y resumirse así:
“Elige un interés que sea lo mejor para ti y no hagas nada más que eso mientras siga siendo un interés verdadero y ganador”
Esto le permite alimentar su fuente de valor de vida con obras nacidas de los sentimientos más fuertes, empatía y atención al detalle.
No hay buen trabajo sin atención y, a veces, pasión, pero éstas se cuidan y no sólo se barajan y se estimulan.
El buen trabajo requiere una necesidad subyacente de buen trabajo. El buen trabajo es el resultado de un intento consciente.
“Hay que decir no a muchas cosas buenas para poder decir sí a muchas cosas excelentes.” — Steve Jobs
Entiendo que tengas una mente caótica. Eso es lo que pasa cuando tu corazón está lleno de pasión por cosas que aún no conoces, cosas que quieres entender. Sería una traición a ti mismo abolir esas pasiones y dejar que se marchiten, pero yo diría que es aún menos satisfactorio terminar tus días sin una obra maestra al pie de tu empresa.
¡Salud!
Eaelll.